Informe de Coyuntura: Junio 2024
El gobierno de Javier Milei, logró en junio su primera victoria política en el Congreso con la aprobación de la Ley BASES y el Paquete Fiscal, dos piezas claves para la implementación de su programa económico. Aunque un poco apartado de su texto original, la Cámara de Diputados aprobó la versión modificada por el Senado, donde el Paquete Fiscal recuperó iniciativas tales como la incorporación de la cuarta categoría de Ganancias y la baja de Bienes Personales.
En el próximo informe analizaremos los aspectos más significativos, su posible instrumentación y sus implicancias económicas, ya que nos referimos a un proyecto que tuvo 6 meses de tratamiento legislativo (pasó por las comisiones Presupuesto y Hacienda, Legislación Penal y Asuntos Constitucionales). Entre los aspectos más destacados, además del fiscal, se encuentran las facultades delegadas al Poder Ejecutivo para reestructurar organismos del Estado, privatización de empresas públicas, una reforma laboral y el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI), entre otros.
Con la aprobación de ambas leyes comienza una nueva etapa para el gobierno, idea ratificada por el Ministro de Economía en la conferencia de prensa brindada al día siguiente junto al Presidente del BCRA, donde habló de una segunda instancia del actual plan de estabilización. Para el ministro, en la primera etapa se cortó la vía de emisión monetaria que era ocasionada por el déficit fiscal y actualmente nos adentramos en la segunda etapa, que prevé «emisión cero» por la vía de los pasivos remunerados del BCRA.
Sin embargo, el ministro no dió mayores precisiones sobre una virtual tercera etapa que contemplaría la tan mencionada salida del cepo, pero proporcionó algunas pistas y prerrequisitos para que esto pueda llevarse a cabo, que pueden sintetizarse en cierto orden macroeconómico como condición necesaria. Está claro que el cepo es indeseable tanto para el gobierno como para la sociedad, pero es una herramienta que ha permitido la acumulación de reservas en un contexto controlado, a pesar del nerviosismo que se intuye en los dólares paralelos y se materializa en la brecha cambiaria y el riesgo país. Por esta razón, Caputo aclaró: «No nos enamoramos del cepo».
Ahora bien, tomando las palabras del presidente del BCRA, Santiago Bausili, que en la misma conferencia confirmó que las reservas en junio tuvieron un saldo negativo (55 millones dólares), y que es muy probable además que el saldo del tercer trimestre también lo sea (por otros 3.000 millones), difícilmente estén dadas las condiciones para salir del cepo antes del cuarto trimestre, siempre y cuando la economía acompañe.
Otras piezas del rompecabezas aún no terminan de encajar, deben ser modificadas o bien cambiadas por otras. Las tarifas y el reacomodamiento de precios relativos es un capítulo que avanza o se detiene según la necesidad fiscal, o el miedo a detener el proceso de desinflación de la economía. Precisamente, la inflación de mayo fue del 4,2% mensual, por debajo de lo esperado tanto por el gobierno como por el mercado (5,5% y 5,2%, respectivamente) y con una inflación núcleo mensual de 3,7%, dejando de lado aumentos estacionales y regulados. Sin embargo, todo parece indicar que en junio se habrían acelerado nuevamente los precios por el impacto de las desregulaciones anunciadas en salud y comunicaciones. En los primeros 5 meses del año los precios acumulan una suba de 71,9% y de 276,4% frente a igual mes de 2023.
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